¡Hola Bellos y Bellas!
Es lunes y como tal pues toca tema variado :D
Hoy os vengo a hablar de un tema muy delicado, la pedofilia y la pederastia.
Hoy os vengo a hablar de un tema muy delicado, la pedofilia y la pederastia.
Hace unos días vi un reportaje en un programa llamado 30 Minuts sobre el tema y desde entonces que no me lo saco de la cabeza.
Primero quisiera marcar la diferencia entre pedofilia y pederastia. La pedofilia se da cuando una persona siente deseo sexual por menores y no constituye un delito puesto que se trata únicamente de algo mental. La pederastia en cambio se da cuando se producen abusos contra los menores, y si es un delito.
Siempre he sentido un rechazo absoluto por todo lo relacionado con éste tema, me horroriza pensar que un adulto sea capaz de herir de esa forma a un niño (como os debe pasar a todos) y por eso mismo nunca me he parado a analizar el tema ni a mirar la otra cara de la moneda.
¿Pero un pedófilo es siempre un agresor? La respuesta es no.
La pedofilia no deja de ser un trastorno del deseo sexual, ¿anti-natural? Sí. Pero igual de anti-natural que otro tipo de orientaciones sexuales (hay cientos de trastornos). ¿Es algo que se pueda cambiar o escoger? Lamentablemente no.
Y quiero que nos detengamos a pensar en esto. Que un hombre sienta deseo sexual por las mujeres, ¿implica que sea un violador? No. Abusar o no de alguien es una elección que nada tiene que ver con nuestros deseos sexuales.
Y a través de éste pensamiento llegamos a los pedófilos abstinentes. Son personas que se sienten atraídas por menores pero que jamás han hecho daño a ninguno porque saben que eso es algo terrible. Reconocen la anti-naturalidad de sus deseos sexuales. Muchos de ellos se consideran monstruos y han tratado de suicidarse.
¿Son estas personas criminales? ¿Que habría que hacer con ellos? ¿Se les debería encerrar por precaución? ¿Y si llegan a abusar de alguien?
Si conseguimos empatizar con un una persona que sufre pedofilia podemos llegar a ver varias cosas.
- No tienen con quien hablar de lo que les sucede.
- Se sienten frustrados por no ser normales.
- Saben la opinión pública respecto al tema.
- No tienen recursos a los que acudir.
- Se sienten monstruos.
Hay que añadir que la sexualidad se les despierta en la adolescencia, como a todos. Así que a éste tipo de pensamientos podemos sumarles todos los cambios que sufrimos en la adolescencia.
En Francia y en Alemania existen programas para ayudar a éste tipo de personas y se ha demostrado que el riesgo de que cometan un abuso se reduce hasta al 80%.
Lamentablemente en España no existe nada así. Aquí se invierte en tratarles cuando ya han cometido el abuso y en las víctimas que dejan.
Y yo pienso, ¿No sería mejor invertir en la prevención? ¿Tenderles una mano antes de que cometan ningún abuso?
Sé que abrir la mente en éste tema es complicado, pero la verdad es que yo después de ver el reportaje he empezado a plantearme las cosas de otra forma. Y me encantaría que vosotros también reflexionarais sobre el tema y me dijerais que opináis.