Falta una semana para Navidad, pero no todo el mundo es feliz en el pueblecito de Pine Cove (California). El pequeño Joshua Barker necesita con urgencia un milagro navideño. Y no es que esté moribundo, ni que su perro se haya escapado de casa: es que Josh ha visto cómo a Santa Claus le abrían la cabeza con una pala. Ahora solo anhela una cosa: que el viejo barbudo regrese de entre los muertos. Lo que no puede imaginar es que alguien esté escuchando sus plegarias... Aunque no destaque por ser, precisamente, el más listo de los ángeles.Solo a una mente como la de Christopher Moore se le podría haber ocurrido una historia tan hilarante como esta. Sus novelas se convierten en superventas de The New York Times y se publican en más de una docena de países. El fenómeno de El ángel más tonto del mundo, al que los lectores anglosajones empujaron a las listas de bestsellers de forma progresiva, ha sido comparado con el de El curioso incidente del perro a medianoche, de Mark Haddon.
Pine Cove es el lugar donde el ángel Raziel va a realizar el milagro navideño. Su misión es simple, debe encontrar a un niño que le pida un deseo y realizarlo.
El pequeño Joshua Barker es el afortunado. Además el pobre acaba de ver como mataban a Papá Noel dándole un palazo en la cabeza y sabe que la Navidad está en juego. Así que su deseo es claro: quiere que Papá Noel vuelva a la vida.
Pero Raziel es un ángel un poco torpe y finalmente termina por resucitar a los muertos del pueblo convertidos en zombies con ganas de comer cerebros y visitar Ikea.
Cómo ya me pasó con la primera novela que leí de Christopher Moore, ''Un trabajo muy sucio'', he disfrutado mucho con su lectura.
Me encanta su humor negro, la forma en que describe situaciones que son terroríficas haciendo reír.
El ángel Raziel, que es tremendamente estúpido pero a la vez entrañable. Y los zombies son muy divertidos a pesar de asesinar a varios ciudadanos y querer comer más cerebros.
Mi favorita ha sido Molly, con su locura y conversaciones con su alter ego. Y cómo demuestra que puede ser una heroína. Su encuentro con Raziel se hace fundamental para salvar la situación, pues el ángel se siente atraído por las personas locas y ella demuestra que a veces es una ventaja no estar muy cuerdo.
Y por supuesto su final es sorprendente.
Es una novela totalmente recomendable, se lee rápido y se disfruta mucho. Hay momentos realmente divertidos y personajes muy curiosos.
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